Lamentamos profundamente su deceso y nos solidarizamos cariñosamente con su hija, la también poeta Marianne Toussaint.
Jessica González Fistsche aborda la obra de Enriqueta, presentamos aquí este ensayo como una manera de rendir pequeño homenaje a la escritora originaria de Coahuila.
ENRIQUETA OCHOA
DE SU VIDA Y DE SU OBRA, A TRAVÉS DEL “RETORNO DE ELECTRA”
“No, la vida del poeta no se puede desligar de su obra.
El poeta tiene un estilo, el estilo es el hombre, el hombre
es sus vivencias, sin esas vivencias no se daría este tipo
de poesía que crea el estilo. Es como si todo eso que se ha
vivido se llevara a otra dimensión en donde se transfigurara
en palabras, en poesía”.
ENRIQUETA OCHOA nace el 2 de mayo de 1928 en la ciudad de Torreón, Coahuila.
Prácticamente toda su vida la ha consagrado a la poesía, pues a muy temprana edad (a los nueve años) comenzó a escribir sus primeros poemas. En entrevistas que se le han hecho ella comenta que la poesía ha sido una especie de “salvación”.
Su padre, Macedonio Ochoa, proveniente de Guadalajara, era el primogénito y por costumbre de la época, debía ser considerado como el ejemplo para los hermanos menores, por lo que recibió una formación de patriarca.
Su madre, Cesárea Benavides, es descrita por Enriqueta Ochoa, como una mujer de carácter muy fuerte. Proveniente de Monterrey, se muda a Torreón para ayudar con los negocios de la familia. Es en esa ciudad donde conoce al que llegará a ser su esposo y padre de la poeta.
Para Enriqueta Ochoa esas dos fuerzas fueron tan poderosas que crearon hijos llenos de temores. El seno absorbente en el que se formó, impregnado de privaciones, indudablemente marcó la forma en que la poeta habita este mundo, su aproximación a las cosas que la rodean y su estilo tan particular de contemplar la creación; más tarde estas vivencias se verán reflejadas en su poética.
La manera en que vivió su infancia provocó que todo su cariño lo concentrara en su seno familiar, enfocándolo principalmente a la figura paterna; la educación que recibió se volvió causa – efecto, de las obsesiones que en el afecto se le fueran formando.
Siendo aún muy joven viaja a Francia, Marruecos y España. Su vida la ha dedicado a la creación poética y a la docencia; distinguiéndose también por su constante preocupación por formar nuevas generaciones de poetas, a través de los talleres de creación literaria que imparte.