Poemas de Slaymen Bonilla (México, 1988)

Del existir
Vete al espejo
traicionera existencia
y huye pasado.

Sueño
Tras tu ventana
el cielo negro cruje
loco y dichoso.

Locura
Tu sombra tierna
borra la triste selva
de mi conciencia.

Libertad
Loco estribillo
disfrazado de viento
vuela al desierto.

México
El viento azteca
dirige su mirada
a la chingada.

 

Historia de una re-evolución olvidada

Corred hacia mi vida,
que el hambre estremece
carga y envilece,
que en tu alma resida.

Busca en la alcoba,
escóndete en la flor sin alas,
vientos soplan
en torno a la niña.

Ya abres el desván
y el fusil suena a lo lejos,
ahí va papá
resuelto a arriesgar la vida.

El ideal es primero mijo,
no lo olvide,
es el recuerdo de grandes hombres
que dieron a la patria su sangre.

Tu má llora
y es que así son las mujeres;
pero usté es macho,
trabaje silencioso como el viento desértico.

A pronto saldrá su a’pá
y aquí le dejó este collar,
inmóvil sueño de ilusión .

Lluvia que sana las entrañas,
el teniente se acerca a galope;
por lo siglos viviremos
y que a los otros
el diablo se los lleve.

Mira el espejo roto
mientras los tuyos mueren
quejumbrosos de tu apatía.

Vuelve la vista,
al indio ves,
desangrado en cultura,
valeroso en combate.

Héroes perdidos que no son ellos,
clientes de perturbadas mentes,
colores borrosos en el cansancio de la mirada,
clima que navega tortuoso.

Su mirada penetra como el acero,
ardiendo desgarrada en odio;
sus bocas te muerden en la oscuridad
y tú de rodillas vencido.

Álzate,
no como temerario estulto,
cargado de desnuda valentía,
sino con albedrío imparable.

Un libro en mano
y no banderas de signos caducos.

El rumor de la grandeza en tu aliento
vestido por la savia de la sonrisa
que deja al cansancio de la muerte
con su triste soledad.

El sublime pensamiento,
confuso espejo de permanencia.

Entregada al bronce del ideal,
a la carne del “enemigo”,
loco por su encontrar.

Volteaba y veía el rumbo,
una tranquila paz que inunda la desdicha,
reflejo de los actos caídos.

El país se abalanza
con conjuros y hechizos
sobre la herejía dispuesta
en la mente de sus gigantes.

Un hilo de hierro cruza la calle
despertando gritos
que se ahogan en lágrimas
y en vientres destrozados.

El corcel verde
busca con su trompa de fuego
alcanzar al rival,
bestia tormentosa.

Y un pájaro rodea el cielo,
cantando alabanzas
que pronto verán su destino en la tierra,
el puerto del infierno.

La selva me azota,
los depredadores sigilosos andan,
las víctimas han desaparecido,
besos en el desierto .

Mana de mi vida la cólera
y una peste embriaga mis sentidos,
que pido no vean
el siguiente resplandecer de colores opacos.

Me recuerdo sentado a tu lado
escuchando historias,
viendo imágenes
de héroes que hoy no encuentro.

Me recuerdo besándote
y llorando tus lágrimas
con su verdad seductora.

Me recuerdo viéndote,
nacido indefenso,
como la mariposa que busca refugio,
ahora desterrada en muerte.

Me recuerdo…
Ya no…
Estoy aquí,
tendido sobre la hoguera,
esperando aquella promesa
en que los veré,
pues cierta habrá de ser la resurrección.

¡Dios, bendito seas!

 

Sueños en una cuna

Dormía en tus brazos,
cálidos como el viento de la mañana,
seguros como fortalezas
y con el consuelo del aroma de Dios.

Las lágrimas son para ti tu sangre,
las derramo por la tristeza ausente
de no entender con tu tibio cuerpo
que eres mi mujer.

Con tu suave mirada me dices
que la vida será el recuerdo de mis sueños,
dormido en tus brazos,
en una cuna inundada por tus caricias.

El tiempo se ve lejano,
en el naufragio de mi olvido,
que crece en los años,
tomando tu silueta de humo.

No te desesperes,
tu canto mi piel conserva,
mi vida en tu latir nace
dormidos en la cuna.

 

Bella habitación

Contigo dormí
recuperando el aliento
de la mujer muerta,
del amor Eros.

Con tu cálida luz
despiertas del sueño
y en las noches
consientes mi ego.

Amor
y más profundidad,
te veo al atardecer,
es una noche de llanto.

Cuentos del abuelo
redondean la fantasía
que en mi vida
muere de inquietud.

Un beso
que toque tu piel,
despierta amada mía,
la habitación está lista.

Ahora dime
si ves la luna,
que me abandona
y me dice que no vuelva.

Despierta,
mi dulce sueño
y vamos al cielo,
que en movimiento
está mi muerte.

 

Pleonasmo

Empecemos comenzando con el inicio de tus labios,
los que me piden solicitándome
aquel olor que suspiro de tus brazos inhalantes.

Te miro con mis ojos dulces,
con miel de un sueño que duerme en sí mismo.

No existes siendo, pues eres existiendo,
mi amada a la que le soy con amor.

Mas, sin embargo, te busco
subiendo arriba del cielo
y creando un nuevo silogismo de las palabras
que te hablarán de mi vida,
una vida que llegó arribando en el amanecer de la mañana,
seductora y sensual,
mostrando en su expresión el deseo del querer dibujarte en el trazo del color.

 

El ser y el pretexto.
1er poema filosófico.

Únicamente hablas
dirigiendo tu mirada
a la amorfa situación
que tendió la realidad.

Naturaleza,
esencia,
razón.

Una vida
en que el acto determina
tu soledad
y responsabilidad.

Actúas
en orden a la reciprocidad,
al hombre,
gobernado por el universal.

Pero llega lo inevitable,
pues tu mortalidad
de ignorancia te llena,
aventándote al abismo.

Te ves en cárcel humana,
restregado en tu soberbia,
tomando un último recurso
y, entonces, cernir el pretexto.

Un existenciario más,
del “otro” repercutido;
es tu apertura
la que te traiciona.

No queda en tu ser
otra razón,
sino aquella que a sí misma se justifica,
marcada por la circunstancia.

 

 

Slaymen Bonilla Núñez

Nació el 7 de Junio de 1988 en la Ciudad de México. Actualmente estudia el 6to semestre de Licenciatura en Filosofía en la Universidad La Salle (ULSA), y el 4to semestre de Licenciatura en Ciencias Políticas y Administración Pública en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM). Ha sido elegido en diversos cargos de representación estudiantil, entre los que destacan la Dirección de Enlace del Consejo Universitario Estudiantil de la Universidad La Salle. Ocupa el puesto de Adjunto de Cátedra de la materia de Metodología Aplicada a las Ciencias Sociales en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UNAM al lado de la Mtra Rina Marissa Aguilera Hintelholher. En 2005 fue ganador del Segundo Lugar del Certamen de Composición y Exposición Poética organizado por la Gran Comisión AJEF, y en el 2006 fue condecorado con la medalla San Juan Bautista De la Salle. Ha participado en diversos cursos y talleres referidos al arte; como la creación literaria y el teatro. Ha sido ponente en diversos foros educativos, así como en conferencias relacionadas con las humanidades. En agosto del 2008 fue ponente en el World Congress of Philosophy, realizado en Seúl, Corea, en donde además tuvo la oportunidad de charlar con filósofos como Enrique Dussel, Juliana González, Rodney Peffer, entre otros. En 2008 obtuvo el primer lugar  en la categoría juvenil del Premio de Haiku «Grau Miro» (España), así como también el segundo lugar del IX Concurso de Creación Literaria realizado por el Congreso Estudiantil de Crítica e Investigaciones Literarias (CECIL) de la UAM-I.