Alejandro Calderón, Perú, 1960

calderonCon más de 30 años de residencia en Francia, Calderón estudió filosofía y Literatura comparada en la Universidad de París. Una muestra de su obra poética.

 

 

calderon
Alejandro Calderón
Alejandro Calderón es un poeta peruano nacido en 1960 que lleva más de 30 años viviendo en París.
Estudió filosofía en la Universidad de París VIII y literatura comparada en la de París III. Ha publicado los poemarios “Transmigración”, traducido y con prefacio de Claude Couffon, París (1992), “Parution de Nazca”, traducido y con prefacio de C. Couffon, París (1994), “A través de la penumbra” traducido por C. Couffon e introducción del crítico literario peruano, Américo Ferrari, París (1996), “Pestañeo de la nada”, traducido por C. Couffon, introducción de A. Ferrari, frontispicio de Alberto Guzmán, París (2000), recopilación de los libros anteriores. Hay que decir que al hispanista, traductor y también poeta Claude Couffon, ya jubilado como catedrático de literatura española e hispanoamericana en la Sorbona, se le rindió un merecido homenaje el 21 de mayo de 2008 en la Casa de América de Madrid.

 

MEMORIA DEL OLVIDO

Algunas veces ser viejo es ser la sombra »
Vicente Aleixandre

 

 

Wifredo LAM

Sonidos canijos carcomen el atalón
de ficciones del Caribe, en su afán,
grafismo de aire es secuencia
de individuación, entre estandartes
de almizcle del discreto río Amarillo,
son esquirlas y brillos de cáñamo
de levadizo miliciano. Al margen 
de la metáfora en pampas del Ebro,
donde oscureció su sombra y su retoño,
aprendió que la felicidad era plana,
y que una sola fuerza se rompe
en los herbazales, y no restituye
lo que se disipa en ralos vitrales
de las plantas. Sacudido en su soledad,
breve fulguración, pulsando la brisa,
en obtuso azul socorre verduzco lodo
de luz. Su inmersión en helechos,
troncos y tonos ocres, agrieta la energía
errante, escurridiza en la grisura 
del presagio; y en fina hamaca 
de luciérnagas, irisada por símbolos
de caoba, su movimiento pendular,
en el trapecio de lianas, perfila
facial fisonomía con sonidos canijos.

 

Paris, 20 Mars 2014

 

 

Alberto GUZMAN

Cae la hoja blanca de las ondas fervientes
del desierto, distante el follaje de algarrobos,
el equilibrio puro plasmará su huella transparente.
Vástago en la cáscara del eclipse de su madre,
confinado a esa corteza de greda, juega 
con la paja visual de promesas de regalo;
sus dedos describen elipses al cielo,
como quien intenta modelar el vacío,
amplificado por la flauta de pastores de cabras.
Mata de agua de ese primer abismo,
en su zanja de ruego, pistilos color incendio
borronean el radio de la circunferencia
con su lectura orientada a su polo.
En la aguada del monte, su escudo tupido
de cantos de grillos, esgrime mástil
equidistante a los ángulos de las estrellas.
Vigor de la cima que es cascada de viento.
Porque lo humano desborda,
la luz es lenta en el mármol,
y desdobla la nervadura de la mariposa blanca.

 

Paris, 25 Août 2013

 

 

Claude COUFFON

En la oscura rama de la noche,
lejano ya a las lenguas de Occidente,
pasas con soltura de una nube
a otra, con el ceño sombrío
de generosa parra. Verde el marco
de la nostalgia, la luz en ángulo
en tus codos, suspende tu presencia
transitoria, bruñida de palabras
en los reflectores; y en chorro
que desgarra lo espectral, los neones
de tu anecdotario, empastan con rubor
el volumen. Adverso a la fanfarronada
y lo deslumbrante, la injuria 
de los astros remotos, hará trizas
la coraza del recuerdo; mas 
tu versión, atoldada en la inmensidad,
vencerá a la epístola ramosa
de granizo. Cultivaba sutil ceniza
su relumbre azul, fuente de su conmoción
aguda, destilada en incesante sensualidad,
en la rama oscura de la noche.

 

Paris, 9 Janvier 2014

 

 

6 comentarios