El derecho al futuro

José Ángel Leyva, Víctor Rodríguez Núñez, Alfredo Fressia.
Amigos lectores, fieles e infieles de La Otra: termina el 2014 llevándose a escritores admirados y queridos de nuestra lengua, como Juan Gelman, José Emilio Pacheco, Félix Grande, Federico Campbell, Vicente Leñero. Pero sobre todo deja a los mexicanos el tajo criminal de 43 estudiantes pobres desaparecidos y al parecer asesinados de la manera más cruel y monstruosa posible. Nos queda pues el dolor de una patria descompuesta y la impunidad como negación del porvenir y la justicia.

      En medio de esta sucesión de atrocidades y de muestras inconcebibles de ejercer la ley al revés, liberación y absolución de personajes corruptos, de criminales y ladrones, La Otra existe como una plegaria de indignación, como un llamado a ser los otros, los mundos posibles, los de la paz con dignidad y justicia, los del ser más que el tener. La Otra es de quienes aún creemos en el valor de las palabras, en el valor de quienes piensan y cuestionan, de quienes renuncian antes de ser presa del conformismo y la complicidad, de la connivencia y la prebenda.

      La Otra no deja de reclamar la muerte violenta de más de cien mil mexicanos en diez años de imperio del crimen organizado, de amasiato entre el Estado y las mafias o carteles del narcotráfico, del maridaje servil de las autoridades de este país con las fuerzas lucrativas de Estados Unidos que venden las armas en este lado de su frontera, consumen las drogas, se quedan con el dinero de las ventas y siembran de muerte nuestros territorios agobiados por el desequilibrio social y económico, por las abismales diferencias entre ricos y pobres, por la ausencia de oportunidades para la juventud.

      Llega el 2015 y con éste una lucecita de optimismo por el despertar ciudadano, por las conciencias que se sacuden los efectos narcotizantes de las cadenas de televisión, empeñadas en justificar el papel de los gobiernos antidemocráticos, de los grupos de poder que empobrecen y destruyen el tejido cultural de México. Una luz débil aún, pero luz al fin, cuando se ve a centenas de miles de ciudadanos tomar las calles para manifestar su voluntad, su convicción de visibilidad de una realidad distinta a la que nos pretenden vender. México es aún algo más que los clichés del fútbol, de las telenovelas, del periodismo adulterado, del patriotismo vacuo, del machismo y la sumisión.

      México es una sociedad y una cultura abiertas por todos los costados a las mejores influencias, un país con un pasado fuerte y una masa pensante y digna, con una tradición de luchas y de ideas que no pueden ser disueltas por la banalidad y lo superfluo. La Otra es poesía y es pensamiento, solidaridad que pasa por un equipo de colaboradores comprometidos con el ser humano y la palabra, con el derecho al futuro y a la libertad de todas las personas, con el respeto a los derechos humanos y con las minorías a formar parte de las mayorías.