La poeta regiomontana, de Monterrey, México, ofrece una muestra de su humor fundido en su oficio de poeta, que dice ejerce a ratos, como cualquiera que se precie de serlo.
POEMAS DE LETICIA HERRERA
Leticia Herrera (1960, Monterrey, México). Poeta a ratos, combina el ejercicio literario con sus ilusiones de docente universitaria, promotora cultural, editora y aprendiz de doctora. Ha publicado una decena de libros, entre otros: Vivir es imposible (2000), Hace falta que llueva (2002), Sólo digan que fui (2011), Celebración del vértigo (2011), Palabras roncas (2016).
Poemas suyos han sido traducidos al alemán, inglés, búlgaro, italiano y árabe, y se han musicalizado algunos de sus textos. En 2011 la UANL le entregó el Premio a las Artes por su trayectoria literaria. En 2012 creó Ediciones Caletita, editorial independiente cuyo propósito es la promoción de la literatura.
PROPUESTA JUSTA
mezclemos nuestros vellos púbicos
porque hace frío y la noche ha caído
seamos por esta vez amigos entrañables
de esos que se estrechan como para fundirse
no voy a pedirte que me dejes
porque te quiero mucho
tampoco quiero que te quedes a vivir
adentro de mis huesos
el pubis me dolería al caminar
si te llevara puesto
pero mira te propongo dame un beso
deja que descubra tu pecho
que te muerda las nalgas
y cuando quieras entrar en mí
no diré nada
me quedaré como una esfinge que goza
en silencio
o si quieres grito
(Sólo digan que fui, 2011)
DECLARACIÓN DE BIENVENIDA
no conozco tu miembro
no me lo has presentado
pero intuyo que de hacerlo
seríamos confidentes
quizá le abriera
mi corazón
como mi anca
para hacerle saber
que en casa
es bienvenido
enhiesto parece y orgulloso
qué diestros modos cuánto arresto
qué dimensión gallarda
me revela
su entusiasmo delata
que a mi mano presto
viniera si dejaras
(Sólo digan que fui, 2011)
DESFIGUROS
si me da el sol de frente me descascaro
como árbol viejo
pero me falta el consuelo de dar sombra
si río creen que me burlo
y cuando lloro piensan que finjo desgracias personales
porque nada me afecta ya que nada siento
si consigo llegar a alguna parte merced
a mis arrestos dicen que todo me lo dieron
si como o si bebo
que no conozco contención
y si acaso me contengo
que escondo mis pecados que soy
mosquita muerta
si expreso compasión o afecto se espantan
y se alejan
y si indiferente paso de largo
murmuran que la arrogancia me define
si levanto el mentón para mirar el mundo
con mis ojos miopes
dicen que siempre altanera
y si bajo el mentón
que tramo
a dónde arrojar el siguiente sarcasmo
si digo que no
que nada me complace
si digo que sí
que siempre fui perversa
promiscua sin redención
cuando le levantaba la falda a la muerte
salieron corriendo como si morir se contagiara
como si en las venas cortadas yo dijera
pagas mi funeral?
y los errores que cometí
como todos
me buscan y me encuentran
aunque mi cabeza es blanca
de tanta inútil claudicación
debería haber manuales que explicaran
que los seres amorfos y dimorfos
tienen extrañas expresiones pero todo
posee un sentido de reparación de daños
voy a iniciar algún vocabulario
para explicar el miedo y las arañas
y luego me voy a abandonar
a las pulsiones que nunca debí dejar
en el banquillo de los acusados
(Palabras roncas, 2016)
CONSUELO
pero los amargosos somos en realidad
la sal del mundo
propiciamos el enunciado magro o profuso
de nuestras rarezas y temores
alimentamos las risas de los otros
que así se colocan a salvo del desastre
y cuando al fin morimos
dicen que qué bueno que dejamos
libre el espacio para algún niño índigo
que viene a salvar al mundo
(Palabras roncas, 2016)
DE AMOROSOS DESIERTOS
de amorosos desiertos estoy hecha
no me sobran amores ni zozobras
tengo lo justo lo que amerito
si voy a la asamblea de los puros
me rechazan
y si a la de los desarraigados
me sacan en vilo
soy torpe
pero no lo hago adrede
de silvestres puntadas me cosieron
a la cola del cometa que aguarda en el suelo
ser alzado
veo y me deslumbra la vida
me palpitan las sienes porque el corazón
corrompe toda ausencia
qué tiene si no voy en pares
el individuo único es un talismán
la perla negra de la historia
NO MÁS
que se dejen de cosas
mis dos pechos
que ya no pienso guardarlos
a calcificarse ciegos
bajo el sostén del anonimato
vientre no seas impertinente
no más placer dúctil
manual
memorioso
cabeza déjame en paz
desde hoy gobierno yo
vieja si quieres
a los hechos me atengo
vengan los ángeles caídos
o castos
que besaré con fruición
la punta de sus alas
me ayuntaré al vértigo
de sus silencios
comeré de su aura
y beberé su leche
de estelar pureza
que mi corazón lo amerita
HOY ANDUVE DESNUDA POR LA CASA
hoy anduve desnuda por la casa
la hija se había marchado a un lugar distante
y no temí la cerradura dando vuelta
el sobresalto el cubrirse pronto y mal
con una servilleta de cocina
un periódico viejo y empolvado
el silloncito de la entrada
bajé corriendo la escalera
antes de tomar la ducha
tenía que erradicar un vello feo que por la noche
al amparo de lo oscurito me brotó en la cara
y me volvía extraño el mentón
quitándole a mi fealdad interesante
sus cualidades singulares
anduve desnuda y recordé de pronto
aquellos años de ver crecer el corazón
cuando era preciso alimentarse
con galones de agua y bocadillos urgentes
después de las batallas y la ropa
quedaba en la silla desvaída
igual que realidad y sus secuaces
ah las demasiadas tardes
las gloriosas mañanas siniestradas
entre manos de seda el abc del abandono
las aulas de la ternura necesaria
ah la savia indulgente del amor
hoy anduve desnuda por la casa
POETA POBRE
ayer me buscaba la policía de la escuela
que por haber faltado a los deberes
y sí
falté
así lo confieso
a veces me llueve y a veces me llovizna
en esta ocasión fue el ventarrón
que al alba me anunció una herencia:
el árbol del vecino
lucía ya sin su rumor de pájaros
tendido en mi patio
tan sin vida
y hube de acompañarlo en las exequias
cuando eres poeta y pobre
te toca hacer de todo
lavar la ropa los domingos
correr al super contestar llamadas
espantar merolicos y ladronzuelos
sacar la basura a medianoche
pasar la escoba por los cuartos
escombrar la recámara y la sala
buscar las ofertas de cerveza
también despedir a los árboles
de su rumorosa fronda
tocarles los brotes y las hojas
(que el asombro vuelve esmeraldas
antes de lanzar su grito al amarillo)
mi vida no es glamorosa
(y huelga que lo diga)
no me dicen maestra en los eventos
cuando acudo a la ceremonia del verso
en cualquier país remoto
donde haga falta con urgencia
la esperanza del canto
tejo y tejo las rutas
que me protegen del invierno
me salgo a caminar al sol del mundo
porque me es menester alimentar los ojos
de llanuras
de cerros
de mares
de lagos que adormezcan
el cascabel del miedo
de voces y risas que se crecen al llanto
y con la cizaña se hacen chambritas
no sé de condolencias
que de todo yo sé tan poco
pero siempre estoy abierta
a las malas conductas
qué otra cosa podría quedarme
en la indigencia sino decir que no
y decirlo tanto como precisen los grilletes
no no no no no no
pero mañana debo reportarme sin más
con la policía escolar y convencerla
de que la muerte de un árbol es motivo
de sobresalto de abismal tristeza
y que además tenía que sacarlo a la banqueta
mutilado
porque soy el departamento de limpia
de ornato y forestación
de compras
de ventas
estibadora
institutriz de gatos
chef de los frijoles y el arroz
y unos cuantos oficios más
que ya no me caben en el pliego
DESNÚDAME
desnúdame
impío
destierra de mi memoria
todo vestigio de moral
ámame con la certeza de los ciegos
palpando cada fulgor de luz
que destello cuando me abres
hagamos el amor porque a estos tiempos
les hace falta que se incendie el cielo
y que ardan en su resaca los mojigatos
rasga conmigo el ocaso
déjame saborear tu piel bruñida por el amor
deja que me solace entre tus piernas
tengo sed y vengo del hambre
el pelo alborotado
los labios perentorios
que dicen que eres mío
en este momento en que la noche se descara
estaba loca si dije antes que no
si me ceñí a la naturaleza de los hombres
cuando soy piedra soy agua
soy carbón que se desangra en ceniza
quédate a resarcirme de la sombra
quítate ya el sombrero y los zapatos
ven a yacer conmigo como si no tuvieras en el mundo
misión más clara que hacerme llegar al sol
dame la piedra filosofal que se yergue con alegría
cuando mis manos la pulsan
daga marmórea que me corta y me transforma
en aire
en viento infantil
en canto azul