Les ofrecemos dos poemas en prosa del poemario El espasmo y la quietud, nuevo libro de Gorka Lasa, escritor y artista visual de Panamá.
Dos poemas
Gorka Lasa
Poema 1
Pensarse en la broma de horas oblicuas. Enlazar la vida a un desierto de sueños imaginarios, oscuridades invertidas, artífices crueles de la melancolía maleable de un ocaso que se resiste a su horizonte. Lentamente se aproxima la noche de la sinrazón, como volutas de humo en el hemisferio cansado de un mundo sumergido. El soñador escribe en su viaje las cartas para soñar la muerte, porque la rotación interna solo puede existir en el plano inconsútil de una epifanía innombrable. Y el testigo, eterno condenado, siempre ausente de su nombre, soñándose en el abismo de la soledad disgregadora, se resiste a flotar en la savia del árbol cósmico, y así poder negar su raíz, desgajándose en llanto sobre los cielos emanados. Porque, de no nacer nuevamente de la metástasis del ovo melancólico, ¿a quién contaríamos que recorrimos el camino de la miseria y la sangre; que la mayor proeza del silencio fue fracasar en el intento de nombrar las cosas; que nada existe y que, por esto, podemos caer hacia arriba, ver la esfera del dolor y beberla como agua, agua que es el fuego trasgresor del propio alumbramiento? Y sí, nació muerto, pero no lo sabe.
Poema 18
¿Dónde están las noches de aquella visión centellante que en el líquido fluir de un metal antiguo se agriaron en su oxido doliente? ¿Dónde están los espacios sagrados, aquellos que evitamos para no escuchar el murmullo de la tierra, su lamento salino, su herida, su demanda? ¿Dónde nacerán los nuevos sueños, ahora que las ballenas, encalladas en las costas del pensamiento, reclaman su injusta muerte, su asfixia terrible en el atardecer del mundo? Arden hoy en la garganta de la vida nuevas formas que agitarán el futuro, heréticos sueños lúbricos para intentar inútilmente trocarnos en la luz que nos creó. Esta es la tragedia de un mundo calcinado, el desierto antiguo donde todo aguarda y comenzará de nuevo. Negro cubo habitado por la esquirla maldita de un viaje ilusorio que, tocando a su fin, supura delirios de eternidad en su lejano hemisferio en decadencia. ¿Somos solo remanentes de un orgasmo creador? ¿Pruebas ineficaces de un fraguador de galaxias de artificio? ¿Somos silencios arrojados a la periferia sin luz, inservibles máquinas espirituales? Somos torpes engranajes de carne que no supieron girar en el corazón del sol. Desechos agónicos de un sueño sin tiempo, tristes mitos olvidados de una leyenda fallida, espejos rotos de la mente alógena. Somos ideas en desuso de un dios que se extinguió.
Gorka Lasa nació en Panamá en 1972. Escritor, poeta y artista visual. Autor de seis libros de poesía.Es director y socio fundador del Grupo Editorial 9Signos. Miembro de la Sociedad de editores y autores para la gestión de derechos intelectuales SEA Panamá. Miembro de la Asociación de Escritores de Panamá y de diversos colectivos internacionales de escritores y poetas. Estudió humanidades y ciencias del comportamiento humano en el Panamá Canal College. Su trabajo figura en publicaciones literarias y páginas especializadas de Internet de Panamá, Argentina, España, Marruecos, Portugal, Alemania, Perú, México, Nicaragua, El Salvador y Chile entre otros. Su obra ha sido traducida al inglés, francés, portugués, rumano y ruso. Ha sido jurado en certámenes poéticos como el Premio Nacional de Poesía Stella Sierra, el Premio Nacional de Poesía Esther Maria Osses y el Premio Nacional de Poesía Gustavo Batista Cedeño. Ha recibido premios, reconocimientos e invitado a representar a Panamá en festivales poéticos y congresos literarios internacionales.