En los tiempos del cólera, escritores de todo el mundo nos comparten su corona-experiencia.
Les ofrecemos un poema de Talat Shahin, poeta de Egipto radicado en Madrid.
Mi vecina
sale y entra en un silencio ruidoso.
A veces habla con su perro,
se queja de su amante,
le da miedo invitarle a cenar el fin de semana,
como siempre.
Tiene miedo que tenga otra amante,
la otra que podría haber tenido el mismo miedo por la misma razón.
Ya sabes,
quizás incluso estaba segura;
pero ella teme que él se lo traiga;
Le quiere,
y le teme.
Dicen que tiene un compañero fiel.
Ella quiere solamente al amante
sin su compañero, covid 19.
No quiere ruinas que contaminen el aire
El cofre está dañado.
…
Imagen fija:
El amor se convirtió en mensajes
Palabras e imágenes en el móvil,
La extraña declara su amor;
Lo ve como un escape de la epidemia.
…
Para matar el silencio, mi vecina
empuja su puerta violentamente, mira el estéril elevador, le tiene miedo,
miedo de tocar sus botones,
Ella se apega a la pureza de sus dedos.
Baja y sube a pie
hasta el octavo piso.
No importa.
A menudo sucede,
que antes de llegar a la puerta de la calle,
regresa,
abre la puerta cuidadosamente,
deja sus zapatos,
va descalza a pesar del frío,
deja su bufanda detrás de la puerta,
tiene cuidado de no tocar sus cosas.
Antes de lavarse las manos
con antisépticos,
sus dedos adelgazaron
y las cosas casi se ven a través de ellos.
Quizás no está satisfecha.
Va sola bajo la ducha,
cada vez más sola.
El agua ya no consuela su cuerpo,
y su perro aúlla en la puerta del baño.
No importa
ladra al vacío