Poemas para Palestina:
Tres Poemas
de Eduardo Mosches

V

Los olivos murmuran
sobre las zanjas que fueron casas
o en los trozos de loza
que alguna vez
cobijaron redondos
panes árabes
que sonreían blanco
a los dientes.
Un trago lento y leve
de agua fresca
lavado el paladar
de ese café pastoso
un corto ademán
de entretejerse dedos
en el mismo momento
en que la explosión
hacía hondo
el instante del silencio.
Las bocas de todos los asesinados
fragmentan
a la historia
en un gemido largo.

Las palabras V

Me han defraudado mis hermanos.
Lo mismo un torrente
como el lecho de torrentes
pasan turbios
sobre ellos se disuelve la nieve
pero en tiempo de estiaje
evaporan
en cuanto hace calor
se extinguen en su lecho.
Brotan toda clase de seres
mudan los vientos
y las nubes
señales
para un pueblo que medita.

X

Las aguas a mitad de la tierra
tormentas saladas
el azul mezclando sus labios con espuma.
Restos de imágenes de telas fenicias
una sirena ahogada en canto
alrededor de un mástil de navío
alguna red engarzada en corales
los corales deteniendo elefantes
esas batallas perdidas quejándose sin sorna
alumbradas por las cuencas vacías de héroes
que no escribieron libros
ni ciego alguno sobre ellos habló.
Los pescadores pasadas las centurias
siguen tomando peces
con la misma parsimonia
al recoger la red.
El sol se reviste de índigo
cuartea las manos
que se enlazan a la arena
al recoger la tarde
cansada
los idiomas se cuelgan
el té azucarado
reposa en la taza
el hombre bebe a sorbos
descansando su fatiga.

No importa el lenguaje
en que se masculle el placer
en un ancho mar semita.
Las latas de sardinas
utilizadas de plato
dan recuerdo tenaz
a las manos bronceadas
que ordeñaron el mar.
Los bañistas entran y sumergen
el calor
en medio de los días festivos
palmotean las tensiones
no es solo un factor
para el conocimiento.
En los últimos años
no es extraño
que los peces mastiquen
botones de camisa.
La carne palestina
es tristeza.
El mar sigue interminablemente
ondeando sus olas.

 


Eduardo Mosches (Buenos Aires, Argentina, 1944) es poeta y editor, radicado en México. Luchador social, conocido por su defensa del pueblo palestino. Director de la revista literaria Blanco Móvil, desde 1985 hasta la fecha. Ha publicado los siguientes libros, entre otros: Los lentes y Marx, poemas Los tiempos mezquinos, Cuando las pieles riman, Viaje a través de los etcéteras Como el mar que nos habita, Molinos de fuego, etcétera. Recibió el premio de poesía Anita Pompa de Trujillo (Sonora, 1995).